Ana Avellano y Miguel Pato (PD)-. Si Mariano José de Larra viviera en el siglo XXI recomendaría a los periodistas y a los políticos cuidar más el castellano y, de esa forma, el pueblo sería más culto. Así lo asegura una de sus descendientes, Jesús Miranda de Larra, que acaba de publicar la biografía más completa de aquel “hombre desesperado”.
“Los políticos hablan mal para parecer ser más demócratas y estar más unidos al pueblo”.
Este año se cumple el bicentenario del nacimiento de uno de los más importantes periodistas del siglo XIX español. Jesús Miranda de Larra publica ahora la “Biografía de un hombre desesperado. Larra” (Ed. Aguilar).
Mariano José Larra vivió en una época de gran inestabilidad política.
“Apoyó los pensamientos liberales pero acabará desesperado por los diferentes gobiernos que transcurren en poco tiempo.”
A diferencia de lo que muchos creen, Miranda de Larra rompe con el mito de que su antepasado se suicidara por amor:
“Larra fue un adelantado a su tiempo y le comprendieron mal”.
El autor explica cómo a Larra se autocensuró muchos artículos ya que sabía que se los prohibirían publicar. La sátira y la ironía le forzaron a escribir mejor para eludir a los que censuraban.
Miranda de Larra en la biografía deja claro que no murió por amor sino por la situación que vive España. El fracaso de su matrimonio se debió a esa falta de libertad.
“Sin libertad ni justicia a Larra se le acabaron los argumentos para seguir viviendo”.
