“Después del 30 de julio, Nicolás Maduro sería decorativo o prescindible para Diosdado Cabello, quien tendría el poder eterno y dictatorial de Stalin, con el control del negocio de la cocaína que tenía Escobar, con todo un Estado petrolero a su disposición”. Firman: Andrés Pastrana y Jorge Quiroga.
Dos expresidente, uno de Colombia y otro de Bolivia. Reconocidos internacionalmente como luchadores contra el narcotráfico acaban de denunciar en numerosos medios de habla hispana la creciente participación del régimen venezolano en el negocio criminal de las drogas iniciado ya con Hugo Chávez y multiplicado por Nicolás Maduro.
Recuerdan que dentro de seis días, el 30 de julio, el país quedará en manos del que llaman “tenebroso Cabello”; será cuando se ordene derogar la Constitución actual, que aunque facilitadora de la dictadura bolivariana, es menos totalitaria que la que vendrá.
El día 30 se aprobará en unas elecciones manipuladas la creación de una nueva Asamblea Nacional Constituyente (ANC) que redactará una Constitución bajo el control de ese Diosdado Cabello, 64 años, la perversa mente militar al servicio de La Habana que lo fue todo con el chavismo y lo será más con el control absoluto del petróleo y la cocaína…
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