La Asociación de Ciencias Ambientales (ACA) denuncia con gran seguimiento de los medios informativos que en España mueren anualmente siete mil personas sobre todo de frío por la “pobreza energética” que sufren, pero nadie comprueba la veracidad del dato: pese a la crisis, este no es un país del tercer mundo y tiene mil métodos para ayudar a los más desfavorecidos.
Los partidos de la ultraizquierda presentan ese número como verdad absoluta y aprovechan cualquier accidente como el de la anciana de Tarragona asfixiada en un incendio porque su nieta se quedaba con su pensión y la alumbraba con velas en lugar de pagar la luz, y denuncian que media España muere de frío por esa “pobreza energética”.
Se llega más lejos: una dirigente de la nueva política española, Carolina Bescansa, exige ahora que la Constitución consagre el derecho a “que nadie pase frío ni calor”…
Siga leyendo aquí y vea a Salas
……