“Tenemos que ayudar a levantar al PSOE” se dicen como una consigna los altos dirigentes del PP.
Creen que de no reaparecer como partido de izquierda moderada se podemizará hasta generar un atractivo radicalismo antisistema que agitará masas y hará oposición envilecedora de revueltas y anarquía.
Pedro Sánchez estaba podemizándose, como mostraba su forma bronca de hacer política sin freno ni reflexión, de promesas incumplibles capaces de atraer masas revanchistas y a la vez incautas.
El germen podemita es el de los fascismos. Indignación y descontento con el sistema democrático que se ha corrompido parcialmente, y que en lugar de corregirse debe destruirse…
Siga leyendo aquí y vea a Salas
……..