(PD).- El corresponsal de RNE en Bruselas Alfonso Sánchez; la periodista Rosa María Calaf; el redactor jefe de la Agencia de Vasco Press Florencio Domínguez; la periodista Beatriz García Fernández, el presidente de Telecinco, Alejandro Echevarría, y el director de Madridiario.es, Pedro Montoliú, recibieron los Premios de Periodismo 2008 convocados por la Asociación de la Prensa de Madrid.
La Real Casa de Correos, sede del Gobierno regional, fue el espacio elegido para entregar estos galardones, que suman ya 70 ediciones y que reconocen la labor de estos profesionales. El presidente de la APM, Fernando González Urbaneja, señaló que el evento celebrado hoy ha sido un «acto profesional y familiar, de periodistas que quieren mostrar el respeto a los demás y a la profesión», especialmente en un año en el que la crisis se está costando muchos puestos de trabajo.
«Estos premios quieren ser homenaje al buen periodismo, de autor, al trabajo bien hecho más que a la notoriedad o el reconocimiento público. Se trata de la dignidad de la profesión, la que creemos que representan los premiados», dijo Urbaneja.
Por ello, han decido distinguir con el premio Rodríguez Santamaría a Alfonso Sánchez, de RNE, «por sus crónicas sin información errónea o inexacta, por tener siempre la primicia y transmitirla con suma claridad con un estilo preciso».
Del mismo modo, se ha hecho entrega del premio Víctor de la Serna al periodista más destacado del año a Rosa María Calaf, ya jubilada, por la cobertura que ofreció para TVE de los Juegos Olímpicos de Pekín, y con el premio Javier Bueno en reconocimiento a una labor sobresaliente a Florencio Domínguez, «uno de los mayores expertos en ETA».
También ha sido reconocida la labor de Beatriz García, quien se alzó con el premio Larra al periodista menor de 30 años; al presidente de Telecinco, Alejandro Echevarría, por su «dilatada trayectoria profesional» en la que sobresalen sus virtudes de editor de prensa, y a Pedro Montoliú, que obtuvo el premio Francos Rodríguez en su trayectoria profesional relacionada con Madrid.
La crisis en el periodismo
Según explicó Urbaneja, la junta directiva de la APM otorga estos premios mediante votación secreta sobre las propuestas de socios e instituciones y manifestó que quienes se mueven por conseguir el premio «no suelen alcanzarlo». «Una defensa encarecida o una presión excesiva a favor de algún candidato suele ser el camino al fracaso», sentenció.
Además, hizo mención a la crisis económica, que está dejando en una difícil situación a muchos profesionales de los medios, que ven como sus empresas reducen plantillas. «De todas las crisis se sale, más o menos maltrechos. Ésta es una crisis dura, que esconde muy al fondo oportunidades», apostilló.
En este sentido, manifestó que la labor de la APM ahora es «defender el empleo» e insistió en que es mejor mantener un empleo con menos remuneración con compromiso de recuperación de la libertad, «que engordar la lista de parados, prejubilados, regulados y excluidos».
«A los editores les pedimos un compromiso con el empleo, al igual que el cumplimiento riguroso de la normativa laboral. Por dignidad y por inteligencia, para que algunos salgamos de la crisis en las mejores condiciones, para una recuperación consistente que nos devuelva la confianza de los ciudadanos por el buen trabajo profesional de los periodistas», sostuvo.
