(PD).- Casi 300 periodistas fueron asesinados en Rusia en los últimos 15 años y la inmensa mayoría de estos crímenes no han sido investigados debidamente, denunció hoy el presidente de la Unión de Periodistas rusos, Vsévolod Bogdánov.
«La media nacional es del 80 por ciento de asesinatos esclarecidos por 20 que quedan sin aclarar, pero con nosotros la proporción es exactamente inversa», dijo Bogdánov, al presentar un estudio sobre las muertes de periodistas en los últimos tres lustros.
El informe «Justicia parcial», preparado por la Federación Internacional de Periodistas (FIP), la Asociación Europea y la Unión Rusa, constata que el ejercicio del periodismo sigue siendo muy peligroso en Rusia y que la mayoría de los crímenes quedan impunes.
El estudio contabiliza más de 250 periodistas muertos en este país entre 1993 y 2009, pero Bogdánov afirmó que murieron «casi 300» y se mostró convencido de que la cifra real es incluso superior, según la agencia Interfax.
«Las autoridades asumieron el control de la investigación de los casos más sonados y escandalosos, pero seguimos sin saber porqué murieron estos periodistas», manifestó Bogdánov.
Agregó que si en años anteriores la mayoría de las muertes se producían en zonas de conflictos armados, actualmente cada vez más crímenes se cometen en tiempos de paz, y los más desafiantes en la misma capital del país.
El presidente de la FIP, Jim Boumelha, denunció a su vez que «la mayoría de los periodistas no mueren a causa de un accidente, sino que son asesinados premeditadamente».
«Así ocurrió con Anna Politkóvskaya», dijo sobre la periodista opositora rusa crítica con la política en Chechenia y el resto del Cáucaso, que fue acribillada a balazos en el portal de su casa, el 7 de octubre de 2006, cuando preparaba la edición de un libro sobre las torturas en Chechenia.
