(PD).- La Vanguardia cerró 2008 con pérdidas después de años «continuados de beneficios», según un comunicado del comité de empresa. Aun así «estas son mínimas si se descuenta el coste de las indemnizaciones por bajas incentivadas» mediante en el cual dejaron el diario más de una veintena de periodistas.
«La plantilla de La Vanguardia se ha ido reduciendo en los últimos años gracias a un proceso continuado de prejubilaciones y bajas incentivadas. De los 629 trabajadores del año 2006 se ha pasado a los 364 de finales del 2008 y en estos momentos ya son poco más de 330, una cifra muy acuerdo con las necesidades de trabajo actuales«, añade el comunicado.
La empresa tiene intención, a pesar de esta reducción, de impulsar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) «por causas económicas, organizativas y productivas» que el comité de empresa entiende «como un intento de vaciar la empresa para entregar las funcionas que ahora hacen los trabajadores de La Vanguardia a otras empresas del Grupo Godó, donde el coste salarial es más bajo» a la vez que advierte que «esa opción se ilegal y por lo tanto nos opondremos rotundamente y con todos los recursos». Los trabajadores preparan asambleas a las dependencias de la Diagonal (redacción) y del Poble Nou (talleres) la próxima semana.
