(PD).- Miguel Ángel Rodríguez, ex portavoz del Gobierno con Aznar, ha puntualizado en su blog la información firmada por Fernando Garea bajo el título de «El amigo de todos», publicada en la edición de este domingo de El País, en la que le vincula con el empresario Francisco Correa, uno de los cinco detenidos en la operación contra la corrupción urbanística en el municipio madrileño de Boadilla del Monte.
Rodríguez dice que «leo con asombro, como no podía ser de otra manera, que El País quiere involucrarme en su campaña contra Aznar y contra el PP, en este caso por las actuaciones del empresario Francisco Correa, que han permitido al juez Garzón ordenar su detención«.
Dice el texto firmado por Fernando Garea, individuo que no se ha molestado en hablar conmigo para ratificar su información: «En la sede de Génova, se recuerda su aparición (la de Francisco Correa) en el inicio de la era Aznar, cuando Miguel Ángel Rodríguez desembarcó en el partido con ideas innovadoras. No había internet y el PP se puso a la cabeza en la organización de actos con megaescenarios y realizaciones novedosas. Se recuerda a Rodríguez dirigiendo personalmente los movimientos de las cámaras y el uso de grandes grúas con dispositivos de video. Quien se encargaba de materializar sus ideas era correa y su empresa Special Events».
«El País» miente de manera indecente.
Durante los diez años que tuve la responsabilidad de organizar los grandes actos del PP nacional nunca contraté a la empresa Special Events ni ninguna de las filiales que veo hoy en los periódicos que conforman el grupo empresarial de Francisco Correa.
Personalmente, nunca he estado en un mitin del PP con el señor Correa, ni se ha paseado por los actos que yo organizaba como si fuera un dirigente. Y mucho menos por el área propio de la organización del acto o de la realización televisiva.
Lo que haya hecho después de que yo dejara de organizar los grandes actos, no lo sé. En el tiempo en que yo fui responsable, nunca se contrató a esa empresa. Pero no porque hubiera alguna sospecha de malas artes, sino porque, sencillamente, no se les contrató. Lo que no sé es cuándo comenzó a contratarse ni a qué nivel, si regional o local.
Detrás de aquellos actos que «El País» califica de «innovadores» ha habido grandes profesionales para los cuales es un insulto aparecer hoy como si estuvieran a sueldo de una empresa que ni conocíamos. Nada de la imagen del PP nacional, de los años de 1988 a 1997, ni ningún acto del que yo fuera responsable directo en ese tiempo, ha sido diseñado ni ejecutado por Special Events.
Ni tampoco el señor Correa ha tenido relación alguna con los grandes profesionales que, eso sí es verdad, contribuyeron a revolucionar una buena parte de la comunicación política en España.
«El País» miente. Pero ya estoy acostumbrado.
