(PD).-Los Godó, Asensio y el resto de editores catalanes están de enhorabuena. Ante la crisis del papel y la prensa tradicional, la Generalitat ha salido al rescate anunciando que regalará la subscripción a un diario a cada joven que cumpla 18 años. A golpe de talonario, el tripartito catalán no se olvida de sus amigos.
La Generalitat ha conseguido domesticar a la prensa de tal manera que el Gobierno catalán es accionista de AVUI y hasta llegó a forzar a Planeta a invertir y mantenerlo aunque sus cuentas no dieran más que números ruinosos. Como contrapartida, la prensa catalana a sido una extensión del Diari Oficial de la Generalitat, volcada servilmente al Gobierno de turno. Así, está maniobra para salvar a editores desesperados no es otra cosa que un premio a tal servidumbre.
Los jóvenes que cumplan 18 años en 2008 y que tengan residencia en Cataluña podrán solicitar una subvención a la Generalitat para una suscripción temporal y gratuita a una publicación periódica en soporte papel o digital.
Un ejemplo más de que los diarios de papel catalanes son como pozos sin fondo en los que, con indisimulada intención catequista, la Generalitat de Cataluña lleva años enterrando ayudas y subvenciones con la parcial intención de que la prensa escrita en catalán llegue algún día a equipararse con la más tradicional y redactada en castellano.
El Departamento de Cultura y Medios de Comunicación -informa el diario E-noticies– ha regulado las bases que tienen que regir la concesión de subvenciones en especie a las personas que cumplen dieciocho años, consistentes en la suscripción temporal y gratuita a una publicación periódica, según una orden publicada este jueves en el DOGC.
La consejería justifica la medida porque «la prensa escrita de Catalunya acumula una larga tradición y disfruta de un reconocimiento social amplio» y es «importante que las generaciones más jóvenes entiendan el valor que tiene la prensa escrita, tanto por el hecho de ampliar su conocimiento del espacio público y de la vida democrática de su país como por el hecho de profundizar en los hábitos de lectura», entre otras razones.